Vivimos una realidad diferente. La cuarentena ha cambiado el estilo de vida de todas las personas. El presente ha traído una gran revolución en varios aspectos. Ahora que el confinamiento nos obliga a resguardarnos en casa, incluso el alimentarse, ya no es lo mismo. Tanto así que, algunos han comenzado a subir de peso.
En medio de lo que representa la cuarentena, es importante plantearse hasta qué punto nuestra dieta es la más adecuada. Las dulces tentaciones de comprar un envase de helado o galletas de chocolate, se han tornado más apetitosas. El dulce da una sensación de placer, lo que nos hace sentir aliviados en estos momentos de estrés.
Si no mantienes un control sobre el consumo de alimentos que estás realizando, puedes afectar significativamente tu metabolismo y tener un fuerte impacto sobre tu salud. La ansiedad que genera mantenerte en casa, por si no lo habías percibido, es la que más te estimula a comer y comer.
En esta ocasión, te ofrecemos un resumen sustancial de cómo llevar una dieta sana durante lo que aún resta de cuarentena.
Cereales y productos integrales
Escoge cereales integrales provenientes de grano entero, pues al mismo tiempo que te aportan energía, se demoran más siendo procesados por tu organismo, lo que te dará una sensación de saciedad más duradera y te ayudará a bajar los niveles de ansiedad.
Productos como el maíz o el arroz son una fuente instantánea de energía. A pesar de que pueda que no te estés moviendo como siempre, tu cuerpo necesita fuerza para desempeñar las labores diarias, por lo que siempre debes incluirlos.
Los cereales y productos integrales generan un aporte importante de fibra, que, por un lado aumenta la sensación de saciedad, y, por otro, contribuye a la eliminación de desechos y a la reducción de la absorción de colesterol, glucosa y ácidos biliares.
Leguminosas
Una combinación con contenido proteico puede incluir legumbres con cereales. No en vano, muchas culturas sirven arroz y frijoles en un mismo plato. De hecho, granos como el garbanzo, las lentejas, las arvejas, el maní y la soya son una alternativa a la proteína animal.
Los garbanzos, por ejemplo, además de ser ricos en vitaminas B1, B2 y B9, cuentan con minerales como el manganeso, el zinc y el hierro, que nos ayudan a fortalecer el sistema inmunológico.
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Frutas y verduras
Las frutas y las verduras son productos que el cuerpo asimila fácilmente, aportan grandes niveles de energía y son excelentes aliados por su digestibilidad y nivel de saciedad que producen. De esa manera, la ansiedad que te lleva a la nevera a buscar cómo calmar tu apetito se desvanecerá. Frutas como la manzana pueden ayudan a reducir el colesterol LDL o de baja densidad y a mantener en equilibrio tu sistema nervioso.
Mantenerse al margen de los malos hábitos alimenticios
El consumo en exceso de alcohol, tabaco o golosinas es perjudicial, aún más en esta cuarentena, ya que la actividad física se ve reducida y, el organismo no alcanza a consumir el exceso de calorías ingeridas. Si quieres mantener una dieta saludable, reemplaza las golosinas por cereales y preparaciones como la granola, que te ofrecen el mismo efecto de placer al comerlos. Recuerda que el consumo excesivo de dulce puede disparar los niveles de azúcar en la sangre.
Una alimentación variada en proteínas
No te limites a consumir carnes rojas. Altérnalas con carnes magras como el pavo o el pollo. Esto te ayudará a tener una mejor digestión, conservando los niveles de proteína requeridos por tu organismo.
En tus preparaciones, intenta que las grasas que uses para realizar la cocción sean saludables, por lo que puedes preferir aceites como el de oliva o de canola y la mantequilla clarificada.
Hidratación
Se estima que el consumo diario de agua que debes realizar es aproximado de de 1,8 litros. Mantenerse hidratado, te permitirá sentir saciedad y aportará en gran medida a los procesos de los distintos sistemas que componen el cuerpo humano. ¡Tu metabolismo te lo agradecerá!
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