Te encuentras atareado en la oficina y de repente, unas ganas enormes de probar bocado interrumpen tu actividad. ¿Qué comerías?
Seguramente esta situación es frecuente en tu rutina diaria, al igual que lo es pensar en la merienda de tus hijos cuando van a estudiar. En ese momento es cuando surge la pregunta ¿qué comer entre comidas? Un alimento delicioso y ojalá saludable es la mejor opción.
Esa necesidad lleva a que busques alternativas para armar tu menú diario y el de tu familia con el propósito de mejorar la nutrición de todos, escogiendo los alimentos más convenientes y las cantidades apropiadas para cada momento del día. O si tu deseo es mantener un peso ideal, identificar aquellos alimentos de alto contenido calórico por otros bajos en calorías que te mantengan satisfecho hasta la hora del almuerzo o la cena.
Si te queda tiempo al final de tu jornada o temprano en la mañana, puedes elaborar algunas de las preparaciones que te recomendaremos, o bien, tomar nota de algunos productos no perecederos que podrías conservar en tu lugar de trabajo o estudio para degustar ocasionalmente como un snack ¡Manos a la obra!
Las ventajas de los frutos secos
La gama de frutos secos, considerados una comida sana para disfrutar en cualquier momento del día, es variada. En los principales supermercados del país puedes encontrar frutos secos de los Estados Unidos, reconocidos en todo el mundo por sus altos estándares de calidad; entre éstos encontramos nueces, maní, semillas de girasol y almendras que podrás disfrutar a toda hora, preferiblemente sin ningún aditivo. Para establecer cuánto puedes comer mide la porción con lo que te quepa en una mano. Otra deliciosa alternativa es preparar en casa unas galletas de pera con arándanos secos, las cuales podrás llevar a tu oficina y también es un perfecto snack para la lonchera de tus hijos.
Mira aquí cómo preparar unas deliciosas galletas de pera con arándanos secos
Quesos entre comidas… ¡claro que sí!
¿Cómo olvidar el queso como fuente de proteína? La idea es consumir porciones pequeñas entre comidas, de manera que no importa si tu snack es con quesos grasos o bajos en grasa; todo depende de tu gusto. Puede ser una rodaja de queso acompañada de tostadas, pan o galletas.
Si te inclinas por una receta vegetariana, esta ensalada de quinua y queso, acompañada de uvas pasas californianas y un toque de pimienta negra americana es una alternativa de comida sana muy fácil de preparar y funciona como refrigerio a media mañana. https://www.saborusa.com/receta/ensalada-de-quinua-con-queso/
El infaltable sándwich
El sándwich es una de las soluciones más prácticas para salir del paso cuando tienes ansiedad por comer. Desde luego, un sándwich sencillo sólo requiere combinar acertadamente los ingredientes y algún aderezo para disfrutar con cualquier bebida. Puedes hacerla con verduras, carnes rojas o magras como el jamón de pavo.
Una opción nutritiva y original para comer entre comidas y por la que te puedes inclinar es un apetitoso sándwich de pavo americano con garbanzo, que une lo mejor de ambos alimentos, con el sabor tradicional de los Estados Unidos y listo para degustar en cualquier lugar bien sea de mañana o de tarde. https://www.saborusa.com/receta/sandwich-de-pavo-y-garbanzo/
Frutas y verduras picadas
Si el tiempo definitivamente no te alcanza, una solución muy práctica es buscar aquellas frutas y verduras fáciles de lavar, picar y llevar para comerlas en el momento que desees. Los más comunes podrían ser los tallitos de apio, zanahoria o pepino.
En el caso de las frutas, tienes a la mano toda la variedad de las cítricas como mandarinas y naranja, o las dulces y semi dulces como el banano, melón, papaya y las siempre oportunas manzanas de Washington cortadas en pequeñas porciones y listas para consumir el mismo día.
Éstas son algunas opciones fáciles de preparar y disfrutar para calmar tu apetito sin afectar las ninguna de las 3 principales comidas del día.
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