Origen

Brunch es una combinación de las palabras en inglés breakfast (desayuno) y lunch (almuerzo); en español sería algo como “almuerzayuno”. El término brunch nació en Inglaterra a finales del siglo XIX cuando los empleados de las familias de la élite británica dejaban preparados grandes banquetes para que sus patrones disfrutaran el domingo y contaran con gran variedad de menús mientras que los empleados tomaban su día de descanso.

Esta tendencia se fue expandiendo con los años a otros, lugares siendo los Estados Unidos, el país en donde el brunch se hizo más popular a partir de 1930.

¿Cuándo se come el brunch?

Momentos de brunch

Inicialmente el brunch estaba pensado para el domingo pues era el día en el que las personas contaban con más tiempo para fusionar en una sola comida el desayuno y el almuerzo. Hoy en día, el brunch ya no es exclusivo de los domingos y muchos lugares lo ofrecen todos los días de la semana.

Menú para brunch

Como su nombre lo indica, el brunch es una combinación del desayuno y el almuerzo por tanto admite alimentos de estas 2 comidas sin importar si son de sal o de dulce. Es así como puedes disfrutar de huevos benedictinos sobre papa crocante y salsa holandesa, pancakes con miel, omelettes, waffles, bagels, muffins, hamburguesas, entre muchas otras preparaciones.

Así como puedes disfrutar de un brunch en diferentes restaurantes y hoteles, también puedes prepararlo tú mismo en casa y disfrutar novedosas recetas.

Descubre algunas exquisitas recetas para brunch

Mini pancakes araña
Fresas con obertura de masmelo, sirope de chocolate y mermelada
Mini sánduches de punta de anca en salsa BBQ y bourbon

Bebidas

Recetas para brunch

En un brunch caben varias clases de bebidas que van desde jugos naturales, smoothies, bebidas calientes, mimosas (champaña con jugo de naranja), hasta cocteles. Todo es cuestión de gustos porque no hay límites cuando de brunch se trata.

Variaciones del brunch

En Estados Unidos también han surgido algunas derivaciones de esta fusión de momentos. Por ejemplo, si la hora para comer es más cercana al almuerzo, algunos lo llaman blunch, dejando sólo la b de breakfast; si es más de mañana y además se le va incorporar algo de licor, lo llaman también drunkfast; y, si la comida es de noche, pero el menú incluye alimentos que usualmente consumimos al desayuno como cereal o huevos con tostadas, suelen llamarla brinner.

Más allá de estas derivaciones, lo cierto es que el brunch ha venido tomando vuelo en varios países latinoamericanos que ven en esta tradición una oportunidad para disfrutar deliciosos platos en buena compañía y con un ambiente lleno de alegría y tranquilidad.