Sin duda alguna, incorporar leguminosas o granos en nuestra dieta es imprescindible. Además, su correcta preparación es clave para potenciar sus beneficios. Si quieres saber cómo sacarles el máximo provecho, revisa cómo combinar las legumbres y potenciar sus propiedades, asegurando platos más nutritivos y balanceados.

Sin embargo, debemos tener en cuenta algunos métodos de limpieza, antes de consumirlas, para liberarlas de agentes externos propios de la cadena de cultivo, transporte y comercialización.

Acá encontrarás los pasos a seguir para limpiarlas y remojarlas correctamente, antes de incluirlas en tus preparaciones.

Garbanzos en colador metálico bajo el chorro de agua en el fregadero
  1. Sumerge los granos o leguminosas bajo el agua unos segundos y, luego escúrrelas.
  2. Ponlas en una vasija, cubriéndolas con agua, a temperatura ambiente.
  3. Añade un activador natural para facilitar todo el proceso. Se recomienda agregar una cucharada de zumo de limón o vinagre de manzana por cada litro de agua.
  4. Escurre el agua del remojo con ayuda de un colador y, enjuaga los granos con abundante agua.

También es importante tener en cuenta que, las leguminosas, deben dejarse en remojo luego de haberse limpiado. Si buscas inspiración para cocinarlas después del remojo, prueba el encanto de un plato de lentejas, una receta fácil y deliciosa.

Un remojo apropiado permite reblandecer la piel para que el agua alcance a penetrar el interior del grano, lo que constituye el secreto para lograr platos con excelente cocción. ¿Cuánto tiempo dejarlos? Los tiempos varían entre 2 y 12 horas, dependiendo de si se encuentran deshidratadas, o no y de la dureza de la corteza.

Legumbres como los fríjoles negros, fríjoles secos, garbanzos y guisantes, se deben dejar en remojo entre 8 y 12 horas, posterior al lavado con un agente activador. Por su parte, las lentejas deben remojarse entre 2 y 4 horas, previo al lavado solo con abundante agua, sin agente activador.

En cuanto a la soya, se recomienda remojarla mínimo 8 horas. Si se desea realizar preparaciones como leche de soya o conservas con soya, se recomienda remojarla mínimo 12 horas.

Las leguminosas suelen acompañarse perfectamente con cereales como el arroz o la quinua, los cuales, aunque son de más fácil cocción, expertos recomiendan remojarlos. Si quieres conocer más usos para estos ingredientes, revisa haz harinas de cereales y legumbres en casa, una alternativa versátil para incorporarlos en diferentes preparaciones.

En el caso de arroz integral o salvaje, entre 2 a 4 horas, previo a su cocción, y, quinoa, entre 2 a 3 horas, utilizando limón o vinagre, como agente activador, en el proceso de limpieza.

Ahora que conoces cómo lavar previamente tus leguminosas, ¿estás listo para deleitarte con sus sabores?

¡Has terminado de leer sobre cómo lavar las legumbres o granos antes de consumirlas! A continuación, te invitamos a responder algunas preguntas para comprobar lo que has aprendido.