¿Alguna vez has pensado en el impacto que tiene una copa de vino en el medio ambiente? 

¡Sí!, la producción de ese hermoso líquido aterciopelado y vibrante puede afectar de maneras inimaginables el ecosistema: desde la cantidad de agua utilizada para regar las viñas, hasta la energía necesaria para su procesamiento y transporte.

Pero, no te preocupes, 
¡en California se pusieron la 10 y están haciendo algo al respecto!

La región vitivinícola de California, además de ser conocida por su “terroir”, variedades de uva y clima único que permite la maduración y concentración óptima de la vid, también se destaca por su compromiso con la sostenibilidad y la responsabilidad social.

A través de un conjunto de valores centrados en las buenas prácticas agrícolas, los productores de vino en California han creado un modelo de negocio que va más allá de la elaboración de una bebida alcohólica para acompañar quesos y ricas comidas.

Este esquema abarca la protección y cuidado de la tierra y los recursos naturales, creación de empleos, apoyo a empresas locales, respeto y comunicación con la comunidad vecina y mejora constante de la producción por medio de investigación y educación.

Hablemos un poco sobre la viticultura sostenible y cómo lograrla

La viticultura sostenible es una técnica cada vez más popular en el mundo, especialmente en el “Golden State”, que busca seguir llenando las copas con una bebida de calidad excepcional y amigable con el medio ambiente.

¿Cómo se consigue?

Básicamente, con la implementación de métodos “eco-friendly” o ecológicos.

Déjanos contarte algunas de las más utilizadas:

Actividades de cultivo orgánico:

Cultivos orgánicos en un amanecer

Un gran porcentaje de vinicultores californianos evitan el uso de pesticidas y herbicidas sintéticos en campo. 

En su lugar, emplean métodos naturales para control de plagas y fertilización, como rotación de cultivos y uso de insectos benéficos (ácaros, arañas, catarinas y avispas) para ayudar en el control de la población de insectos dañinos. 

Animales como gallinas y ovejas son también utilizados para controlar gusanos cortadores y mala hierba, respectivamente.

Conservación del agua:

Cultivo en surcos siendo regado por chorros de agua

California es una región que se caracteriza por la escasez de agua, una razón de peso para optimizar su uso en la producción de vino. 

De ahí que se empleen herramientas eficientes como el riego por goteo con el fin de controlar la cantidad y lugar donde se requiere, así como la recolección de agua de lluvia y el reciclaje.

Energía renovable:

Cultivo y páneles solares

Un número considerable de empresas vinícolas en la región utilizan fuentes de energía renovable para reducir su huella de carbono. 

Algunas cuentan con paneles solares para generar energía, mientras que otras se apalancan en biocombustibles.

Reciclaje y gestión de residuos:

Hombre haciendo compostas al aire libre

Gran parte del éxito al implementar técnicas “eco-friendly”, está en asegurarse de que todos los residuos generados durante el proceso de producción sean gestionados de manera responsable y sostenible. Por ejemplo, el compostaje permite reciclar restos de la cosecha y residuos orgánicos.

¿Qué es eso del compostaje? 

El orujo de uva se recicla y se convierte en una especie de tierra mágica que ayuda a mantener los nutrientes en el suelo y a absorber y retener agua. 

Prácticamente, es un oasis para los viñedos.

Uso de los suelos:

Cultivo siendo roseado con mangueras de agua

Para que la vid y sus frutos crezcan súper saludables, se necesitan suelos que también lo estén. 

¿Y, sabes qué? Los productores de uva de California tienen un truco bajo la manga para conseguirlo: ¡utilizan cultivos de cobertura!

Éstos son plantas que se siembran entre las hileras de las vides y aportan nutrientes al suelo, controlan el crecimiento de la vid, atraen insectos buenos y previenen la erosión. Es una fiesta para los viñedos.

Conservación de la biodiversidad:

Hombre plantando árboles

Dentro de las buenas prácticas implementadas en la tierra del sol eterno, se encuentra la conservación de la biodiversidad de la región. 

¿Cómo lo hacen?

 Promoviendo la plantación de árboles y creación de hábitats naturales para fomentar la presencia de animales y plantas en el ecosistema local.

La viticultura sostenible no solo es buena para el medio ambiente, 
¡también es buena para ti! 
Algunos productores de vino consideran que el uso de técnicas “eco-friendly” puede mejorar la calidad del vino. 

Después de todo, cuando las vides crecen en un entorno saludable y equilibrado, es más probable que produzcan un vino delicioso y de alta calidad.

Ahora que sabes que sí es posible brindar con una copa de buen vino que también cuida el planeta, la próxima vez asegúrate de hacerlo con uno que sea sostenible. 

Encuentra aquí algunas de las marcas que trabajan con estas buenas prácticas.

¡Has terminado de leer sobre el vino sostenible de California! A continuación, te invitamos a responder algunas preguntas para comprobar lo que has aprendido.