Son muchas las razones por las que estas deliciosas bayas nos pueden asombrar,
al igual que cuando vemos a un hombre volando y levantando un camión con sus brazos.
Los arándanos rojos, también conocidos como cranberries, están catalogados como la
superfruta originaria de Estados Unidos.
Provienen de las zonas más nórdicas del país donde sus cultivos nos ofrecen todo un
deleite para ojos y paladar.
Estados como Wisconsin, Massachusetts, Oregón, Nueva Jersey y Washington son los
principales productores, gracias a las óptimas condiciones de terrenos arenosos,
abundantes en agua dulce.
En tierras pantanosas crecen las plantas que, al florecer y dejar caer sus pétalos, dejan al
descubierto el fruto del arándano.
Cuando éste alcanza la madurez, el terreno se inunda provocando que los frutos se liberen de la planta,
queden flotando y su recolección sea más fácil.
Una vez recolectados, el 95% de los arándanos se congelan y se envían a plantas de producción
destinadas a la transformación en salsas, confituras, mermeladas y zumos o deshidratados para ser consumidos
directamente o incorporarlos en deliciosas y nutritivas preparaciones.
El 5% restante se vende como fruta fresca.
¡Imagínate! No solo es recomendado para el tratamiento de infecciones como la cistitis, sino
también para la prevención y manejo de múltiples enfermedades o patologías:
Para el sistema digestivo
Un consumo regular de arándanos rojos contribuye a conservar la flora
intestinal, al contar con efectos similares a los de los probióticos.
Para el sistema cardiovascular
Gracias a sus antioxidantes, se fomenta la fluidez de la sangre y la reducción de los niveles
de presión sanguínea.
Para el sistema nervioso
Al contener antocianina, un nutriente que beneficia el desempeño de la memoria
y agudeza mental, su ingesta se asocia con un menor riesgo de desarrollar Alzheimer.
Adicionalmente, estimula el crecimiento de células nerviosas y facilita la comunicación entre éstas.
Previenen el envejecimiento prematuro
Pueden ser una gran herramienta para retrasar el envejecimiento,
debido a sus antioxidantes que suprimen los radicales libres de la superficie de las
membranas celulares, perjudiciales para el bienestar de la piel.
Fortalece el sistema inmunológico
Por ser ricos en vitamina C, se fortalecen las defensas para combatir diversas dolencias.
Estudios científicos recientes afirman que podrían
disminuir el crecimiento acelerado de tumores cancerígenos.
Te ayudan a conservar una buena salud dental
Sus propiedades son fabulosas para reducir bacterias en la boca y conservar una adecuada limpieza.
Protegen tu salud visual
Son un excelente aliado para los ojos, pues colaboran en
el cuidado de la retina del paso directo de los rayos ultravioleta.
