En la época colonial, con la llegada de las tradiciones cerveceras de Inglaterra y
los Países Bajos al país del norte, el vino se vió desplazado como el rey del consumo.

En ese entonces, las “ales” británicas eran las amas y señoras, hasta que aparecieron los
estilos “lager” alemanes y se apoderaron del escenario, no sólo por su sabor, sino
también por la rentabilidad, dada su fabricación a gran escala.

Este tipo de cerveza se convirtió en la estrella, dejando un poco relegadas a las locales
Luego, llegaron retos como el desafío de crear una lager que no necesitara refrigeración,
dando orígen al nacimiento, en San Francisco, de la famosa Steam Brew o cerveza de
vapor, estilo 100% americano.

En 1829, D.G. Yuengling & Son, por su parte, fundó la
cervecería operativa más antigua en Pottsville, Pensilvania.
Al día de hoy, su legado perdura, siendo la mayor empresa de
propiedad estadounidense y un ícono para los buenos conocedores.

Más adelante, en 1840, Milwaukee fué testigo del auge cervecero con el nacimiento de
Best Brewing, Valentin Blatz Brewing Company y Joseph Schlitz Brewing Company.

Con el arribo del ferrocarril y la oportunidad de recorrer nuevos caminos, en la segunda
mitad del siglo XIX, la birra llegó a Chicago y St. Louis, de la mano de pioneros como Pabst.

Por otro lado, en 1842 era fundada la Weston Brewing Company, en Missouri,
considerada una de las primeras cervecerías “lager” en Estados Unidos.

Casi 20 años después, Eberhard Anheuser y Adolphus Busch dieron un giro épico, en
1860, al introducir la famosa Budweiser, que se convertiría en la más grande del mundo.

Gracias a su innovación de refrigeración en vagones, la Budweiser embotellada,
llegó a ser la primera marca nacional.

A pesar de la disminución del consumo de alcohol entre 1880 y 1919, la oleada de
inmigrantes desde Europa central y oriental volvió a prender la llama del amor por la cerveza.

Hasta que surgió la famosa ley seca de 1920, que prohibió la elaboración, venta y
transporte de bebidas alcohólicas.

La mayoría de las cervecerías cesaron su actividad, y solo las más grandes lograron
sobrevivir, a partir de bajo contenido alcohólico, jarabe de malta y otros componentes no alcohólicos.

Tras la prohibición, la Anchor Brewing Company se convirtió en el “salvador” exclusivo de
este estilo auténticamente estadounidense dando paso a la consolidación de una
industria que, a la fecha, representa un mercado de US $691.63 millones,
según Mordor Intelligence.

En la actualidad, el país anglosajón ocupa el segundo puesto a
nivel mundial, con 194,1 millones de hectolitros y 9,118
cervecerías en su territorio.

Desde pequeños espacios artesanales hasta establecimientos más grandes y robustos; la
diversidad e innovación se han convertido en una parte fundamental de la cultura
culinaria y económica del país.

Además, deja ver el arraigo que tiene esta bebida en el tejido social, siendo una
acompañante infaltable en celebraciones, eventos deportivos y momentos de
esparcimiento.

El aumento del interés del consumidor por la cerveza artesanal ha estimulado la demanda y ha
proporcionado oportunidades comerciales para los negocios en todo el país. Los clientes
están cada vez más interesados en probar nuevas y curiosas variedades, lo que ha llevado al
incremento de la oferta y a innovar en sabores, técnicas y diseños de marca.

En este fascinante mundo, existen seis tipos de cervecerías:
Micro: pequeña y creativa, alcanza menos de 15,000 barriles anuales y, despacha,
principalmente, fuera de sus instalaciones.
“Brewpub”: ofrece servicios de restaurante y, al menos el 25% del preciado líquido se disfruta in situ.
“Taproom”: sin cocina, pero con excelentes fórmulas, vende el 25% de su cerveza directamente en el local.
Regional: se habla de ligas mayores, entre 15,000 y 6 millones de barriles.
Por contrato: produce la bebida para otra compañía que se encarga de comercializar, vender y distribuir.
Propietario alternativo: similar a la contratista, pero con todas las responsabilidades de un comercio con licencia.

Ale dorada o rubia
Color: pajizo a dorado.
Sabor: el dulzor de la malta y el tostado están presentes en el gusto y aroma, en niveles bajos a
medio-bajos.

Sesión India Pale Ale
Color: pajizo a cobre.
Sabor: maltosidad media también distintiva en aroma.
Amargor: medio a alto.

Pale Ale jugosa o nebulosa
Color: dorado pálido
Sabor: floral, cítrico, afrutado (bayas, tropicales, frutas de hueso), azufroso con notas de cebolla
y ajo, pinares y resinosos.

Pale Ale fuerte, jugosa o nebulosa
Color: pajizo a ámbar claro.
Sabor: afrutados y tropicales con presencia de lúpulo de medio-alto a muy alto.

India Pale Ale estilo americano
Color: pálido a cobrizo.
Sabor: floral, cítrico, afrutado (bayas, tropicales, frutas de hueso),  azufroso con notas de
cebolla y ajo, pinares y resinosos.

India Pale Ale jugosa o nebulosa
Color: pajizo a ámbar claro.
Sabor: afrutado, tropical y jugoso .

Ale estilo belga americano
Color: dorado a negro.
Sabor: la percepción de las maltas o cebada especiales o tostadas puede ser de baja a robusta
en las versiones más oscuras.

Brown Ale estilo americano
Color: cobre intenso a marrón oscuro.
Sabor: son propios los rangos medios de aromas y sabores de malta tostada, caramelo
y chocolate.

Ale negra estilo americano
Color: oscuro a negro.
Sabor: con aromas frutales, cítricos, pino, florales, herbáceos u otros derivados de lúpulos de
todos los orígenes.

Stout estilo americano
Color: negro.
Sabor: son prominentes los aromas a café, cebada y malta tostada.

Porter imperial estilo americano
Color: negro.
Sabor: dulzor medio de malta, caramelo y cacao.

Stout imperial estilo americano
Color: negro.
Sabor: aroma a malta dulce, siendo moderada la astringencia y el amargor de la malta tostada.

Ale roja doble de lúpulo
Color: ámbar intenso a cobre oscuro/marrón rojizo.
Sabor: malta caramelo de medio a medio alto y galleta o malta tostada de bajo a medio.

Cerveza roja imperial
Color: ámbar intenso a cobre oscuro/marrón rojizo.
Sabor: alto, derivado de cualquier clase de lúpulo.

Imperial estilo americano o doble India Pale Ale
Color: pajizo a ámbar medio.
Sabor: malta con carácter de caramelo pálido.

Jugosa o nebulosa Imperial o Double India Pale Ale
Color: pajizo a ámbar claro.
Sabor: aroma y sabor a malta con tonos frutales, tropicales y jugosos.

Ale de vino de cebada estilo americano
Color: ámbar a rojo intenso/granate cobrizo.
Sabor: atributos aromáticos de malta de caramelo o toffe.

Ale de vino de trigo estilo americano
Color: dorado a negro.
Sabor: aroma y gusto a malta de pan, trigo, miel o caramelo.

Porter ahumada
Color: marrón oscuro a negro.
Sabor: malta negra o ligero tostado. Puede también mostrar elementos
de caramelo o chocolate.

Ale agria estilo americano
Color: pálido a negro.
Sabor: en las más oscuras, sutil aroma y sabor a malta tostada, caramelo o chocolate.

Ale agria con frutas al estilo americano
Color: pálido a negro dependiendo del estilo de cerveza subyacente y, a menudo, influenciado
por el color de la fruta añadida.
Sabor: en las más oscuras, leve aroma y sabor a malta tostada, caramelo o chocolate.

India Pale Ale al estilo de la costa oeste
Color: pajizo a dorado.
Sabor: exhibe una amplia gama que incluye flores, pino, cítricos, frutas (bayas, tropicales y
frutas de hueso), azufre, cebolla, ajo y resina.

La empresa cervecera en Estados Unidos ha adoptado modelos sostenibles como eje de su
desarrollo: desde la conservación del agua hasta la gestión de residuos y la reducción de
emisiones.

Según datos de la Brewers Association, la organización sin fines
de lucro que promueve y protege al gremio, más del 75%
participa activamente en programas de sostenibilidad.

Este compromiso se refleja en la implementación de tecnologías más eficientes, la utilización de
ingredientes locales , así como prácticas de gestión ambiental en todas las etapas de
producción.