Variar la rutina de proteínas en nuestra alimentación es fundamental como quiera que este nutriente mantiene y regenera los tejidos de músculos, huesos, cerebro, corazón, aparato digestivo, respiratorio, nervios y piel.

La proteína la encontramos en alimentos de fuente animal (carne, aves, pescados, huevos y lácteos) y vegetal (fríjoles, lentejas, soya, frutos secos y semillas entre otros).

Todos necesitamos proteínas sin importar si provienen de fuente animal o vegetal. Lo importante es satisfacer los mínimos requeridos que están entre 142 gr y 200 gr diarios, dependiendo naturalmente de la necesidad de calorías de cada persona.

En cuanto a proteínas, los alimentos de los Estados Unidos son una excelente opción para nuestras comidas. Productos provenientes de allí como carne de res, de cerdo, pollo, pavo, jamones, fríjoles lentejas, garbanzos, maní y quesos se consiguen fácilmente en los principales supermercados de nuestro país.

Opciones de proteína – SaborUSA

Las posibilidades son muchas, así que ten en cuenta las siguientes recomendaciones que te ayudarán a rotar los alimentos proteicos en tu dieta.

Amplía tus opciones de proteína

  • Además de las carnes, experimenta con fríjoles, lentejas, garbanzos, frutos secos, soya y pescado como platos principales.
  • Trata de comer pescado en lugar de carnes al menos 2 veces por semana. Selecciona un tipo de pescado que sea rico en aceites y bajo contenido de mercurio como el salmón o la trucha.
  • Elige cortes magros de res y la carne molida que sea al menos 93% libre de la grasa que conocemos como gordo. Cuando consumas carne de aves retírales la piel.
  • Los huevos pueden ser una opción barata de proteína y parte de un estilo de alimentación saludable. Un huevo al desayuno al menos 5 veces por semana te vendrá muy bien.
  • Otra opción saludable, nutritiva y económica son los alimentos con proteína vegetal. Trata de incorporar más a menudo en tu dieta, fríjoles, lentejas, garbanzos, arvejas secas o productos con soya. Además, son más bajos en grasa saturada y algunos, más ricos en fibra.
  • Los frutos secos y las semillas también son una buena fuente de proteína y son ideales en snacks. Sin embargo, trata de comer porciones pequeñas pues tienen un alto contenido de calorías.

Realmente son muchas las alternativas de alimentos que nos proporcionan proteína y que, si los distribuimos bien en nuestra dieta, nos darán la posibilidad de tender un menú más variado que nos permita satisfacer nuestras necesidades nutricionales.